domingo, 23 de septiembre de 2012

INNOVACIÓN EDUCATIVA

Mediación de aprendizaje interactivo constructivo investigativo

La Neurociencia y el hecho educativo

 La neurociencia señala que cada cerebro es único e irrepetible, puesto que cada persona nace con un alambrado particular, sin embargo, éste posee una estructura común a todos los humanos; el cual es moldeado por la experiencia. (Salas, 2008). Esa  diferencia neurobiológica se puede observar en la conducta personal, social y profesional de cada ser humano.  A este aspecto se le denomina estilo.



Según Santos y Doval, (1993, citado por Salas, 2008) el estilo se relaciona con el conocer (¿Cómo sé yo?),  con el pensar (¿Cómo pienso?),  con el afecto (¿Cómo siento y reacciono?) y con la conducta (¿Cómo actúo?). Lo cual puede estar influenciado por factores genéticos o de historia personal. De acuerdo a lo anterior, cada persona tiene un estilo particular de percibir,  procesar la realidad y de representarla mentalmente.
     Por su parte, cada hemisferio cerebral tiene su especialidad y su estilo en el procesamiento de la información, pues se considera al hemisferio izquierdo como verbal y su proceso de captación lo hace de una manera serial y analítica, mientras que el derecho es más visual y sensitivo. No obstante, el izquierdo también percibe lo visual pero de una manera más detallada, mientras que, el derecho lo hace de una manera global. (Soriano, Guillazo y otros, 2007).
     Según lo expuesto, se puede apreciar una dicotomía donde izquierdo – analítico y derecho – holístico. No obstante, las funciones de un hemisferio no son excluidas en el otro, ya que las diferencias entre ambos están dadas en cuanto a la cuantificación y no en la ausencia de funciones dentro de las cuales cada hemisferio se especializa.
    En consecuencia, cualquier actividad cognitiva compleja de la vida cotidiana requiere del uso de las funciones básicas, como el lenguaje, la percepción de las emociones, etc.,  lo que conlleva de manera inminente al uso simultáneo de los dos hemisferios.
     Por otra parte, Alcaraz y Gumá (2001),  señalan que aunque existe una especialización funcional de los hemisferios cerebrales, basado en estudios realizados a individuos normales, resulta difícil encontrar resultados claros, debido a que se presenta una gran comunicación entre ambos hemisferios a través de las comisuras cerebrales que permiten que la información pase de un lugar a otro en cuestión de milisegundos.
     Los autores antes mencionados, consideran que el cerebro del varón funciona de manera más específica mientras que, el de la mujer lo hace de manera más global, utilizando estrategias de ambos hemisferios para procesar todo tipo de información. Lo anterior implica que, la mujer establece con mayor facilidad una conexión entre los códigos verbales y emocionales.  
     Cabe anotar, que cada individuo tiene una tendencia particular de intercomunicarse con el mundo exterior, ya  que algunos se inclinan por un canal sensorial específico, es así, como algunos son más visuales que auditivos; otros más quinestésicos  que táctiles. Dicha tendencia de preferir un sentido más que otro, en una situación problemática o de estrés, conlleva a la utilización de una estructura del cerebro o la inclinación hacia la utilización de uno de los dos hemisferios, a esto se le denomina dominancia cerebral o estilo cerebral. (Salas, 2008).
 Algunas teorías afirman que existen dos estilos cognitivos diferentes, de la cual cada hemisferio cerebral toma su parte, es así, como los individuos que son “derechos” serán más visuales, holísticos o sensibles a las emociones, mientras que los “izquierdos” serán más verbales y analíticos. (Soriano, Guillazo y otros, 2007). Asimismo, se considera que el hemisferio derecho aporta una mayor creatividad al ser human0
 ESTILOS DE APRENDIZAJE
 Algunos autores conciben el concepto de estilo de aprendizaje como la forma en que la mente procesa la información o como es influida por las percepciones de cada individuo. 
Sin embargo, existen muchas definiciones sobre los estilos de aprendizaje, en la que diversos autores dan su particular definición.
Así, por ejemplo, Navarro (2008) la define como el hecho de que cada persona utiliza su propio método o estrategias a la hora de aprender; aunque éstas varían según lo que se quiera aprender, lo que conlleva a que cada individuo tienda a desarrollar ciertas preferencias o tendencias globales, las cuales definen un estilo de aprendizaje.
Con respecto a lo expuesto, el autor antes mencionado afirma que cada persona aprende de acuerdo a su propio ritmo, a diferentes velocidades, inclusive aunque se tenga las mismas motivaciones, un nivel instruccional  idéntico y la misma edad; su estilo será muy particular. Sin embargo, no se debe encasillar al individuo en un estilo cerrado, puesto que, el aprendizaje es algo dinámico y que está en constante evolución. Además, se da el caso que un mismo individuo presenta estrategias que en teoría son pertenecientes a diferentes estilos de aprendizaje.
CARACTERÍSTICAS DE LOS ESTILOS DE APRENDIZAJE
     Según Navarro (2008) las características de los estilos de aprendizaje se presentan desde tres perspectivas que son: 1. Desde la perspectiva de la recogida de la información, 2. Atendiendo al modelo de los hemisferios cerebrales y 3. Según el análisis de la información.
De acuerdo a la primera perspectiva, se encuentra el aprendizaje visual en lel cual los estudiantes aprenden a través del contacto visual con el material educativo. Su capacidad de abstracción se encuentra apoyada en imágenes, que les permite absorber gran cantidad de información con mayor rapidez.
En este caso, el uso de láminas, diagramas, gráficos, carteles, videos, películas,  entre otros elementos visuales, facilitan el aprendizaje a este grupo de individuos. Se estima que un 40% o 50% de la población poseen este estilo de aprendizaje.
     Además del anterior, está el aprendizaje auditivo, en este caso los alumnos aprenden escuchando el material didáctico, en éste se adaptan más al formato de la clase expositiva. Sumado a esto, quienes poseen este estilo son hábiles para aprender idiomas o música. No obstante, su manera de almacenar la información es transfiriendo lo auditivo a un medio visual. Se calcula que entre un 10% y un 20% de la población maneja el estilo de aprendizaje auditivo.
     Por su parte, en el estilo de aprendizaje kinestésicos se necesita que el educando interactúe físicamente con el material de estudio, para aprender necesitan asociar los movimientos o sensaciones corporales. Así, por ejemplo, en una clase expositiva, se balancearán sobre su silla, intentarán levantarse, la pasarán haciendo garabatos o dibujos, etc.
      En virtud de lo anterior, pueden recordar mejor lo que hacen en lugar de lo que ven o escuchan. Para este caso, resultan convenientes los trabajos de campo, las actividades físicas, la pintura, los experimentos de laboratorio, los juegos de rol, etc.  Dentro de este estilo se encuentra un  30% y un 50% de la población.
    Atendiendo a la segunda perspectiva planteada por Navarro (2008) referida al modelo de los hemisferios cerebrales están los siguientes: 1. Alumno hemisferio lógico, 2. Alumno hemisferio holístico.
1.    El alumno hemisferio lógico:
·         Visualiza símbolos abstractos (letras, números) y no tiene problemas para comprender conceptos abstractos.
·         Verbaliza sus ideas.
·         Aprende de la parte al todo y absorbe rápidamente los detalles hechos y reglas.
·         Analiza la información paso a paso.
·         Quiere entender los componentes uno por uno.
·         Le gustan las cosas bien organizadas.
·         Se siente incómodo con las actividades abiertas y poco estructuradas.
·         Le preocupa el resultado final. Le gusta comprobar los ejercicios y le parece importante no equivocarse.
·         Lee el libro antes de ir a ver la película.
2.    El alumno hemisferio holístico:
·         Visualiza imágenes de objetos concretos pero no símbolos abstractos como letras o números.
·         Piensa en imágenes,  sonidos, sensaciones pero no verbaliza esos pensamientos.
·         Aprende del todo a la parte. Para entender las partes necesita partir de la imagen global.
·         No analiza la información, la sintetiza.
·         Es relacional, no le preocupan las partes en sí, sino saber cómo
·          encajan y se relacionan unas partes con otras.
·         Aprende mejor con actividades abiertas y poco estructuradas.
·         Les preocupa más el proceso que el resultado final.
·         Necesita imágenes, ve la película antes de leer el libro.
     La tercera perspectiva está enfocada hacia el análisis de la información, en este aspecto se encuentran 
       1. Los activos, 2. Reflexivos, 3. Teóricos, y 4. Pragmáticos. 
     1. Los activos: Son de mente abierta, trabajan con entusiasmo las nuevas tareas, les gusta trabajar en equipo y además centran sus esfuerzos en las actividades.
     2. Reflexivos: Son prudentes y consideran todas las alternativas antes de actuar. Recogen datos y los    analizan antes de llegar a una conclusión.  Disfrutan observando la actuación  de los demás, escuchan y no participan hasta que no están seguros. Crean a su alrededor un aire distante y condescendiente.
    3 .Teóricos: Adaptan e integran las observaciones (hechos) dentro de teorías coherentes. Encaminan los problemas de una manera vertical, escalonada y por etapas lógicas.  Son perfeccionistas. Les gusta analizar y sintetizar. Son profundos en su sistema de pensamiento. Buscan la racionalidad y la objetividad.
    4. Pragmáticos: Les gusta actuar rápidamente en aquellos proyectos e ideas que les atraen. Se muestran impacientes con las personas que teorizan, son decididos y su filosofía se centra en la practicidad de las cosas.
PREMISAS GENERALES PARA UNA APLICACIÓN PRÁCTICA DE LA NEUROCIENCIA.
Cabe mencionar  que tradicionalmente en las escuelas se ha hecho énfasis en una enseñanza lógico-verbal, lo que permite, de manera dominante,  la activación del hemisferio cerebral izquierdo. Resulta conveniente también estimular el hemisferio derecho,  a través de la presentación del material de estudio en una forma que permita a los estudiantes utilizar  los cinco canales sensoriales y que no se quede sólo en el aspecto visual y auditivo, sino que se integren los demás sentidos. Para así darle un aspecto vivencial que incremente el nivel de fijación del nuevo aprendizaje.
    Aunado a lo anterior, es conveniente que el alumno pueda integrar las partes de un todo, la posibilidad de una comprensión holística del contenido, en la cual se asocien materias dentro de un esquema conceptual mayor. 
Teniendo en cuenta algunos aspectos del hemisferio derecho se plantean algunos lineamientos generales para su aplicación práctica en el proceso de enseñanza –aprendizaje.

1.    Trabajar en una modalidad simultanea o paralela.

    Por ejemplo si se está abordando una temática a través de la lectura de un libro, dicha actividad ejercita el hemisferio izquierdo, gracias a su modalidad lógico-verbal. Para que haya una integración de ambos hemisferios se debe proveer al estudiante de experiencias sensoriales que permitan ejercitar el hemisferio derecho, en este caso es conveniente la utilización de videos, los cuales afianzan ese nuevo aprendizaje.
2.    Sea holístico y global.
 Se debe buscar una integración de la temática que se le enseña a los estudiantes con las diversas asignaturas para que haya una correlación en los temas y de esta manera se contribuya a fortalecer el aprendizaje de los mismos.
3.    Seguir una lógica analógica.
     Es conveniente ilustrar lo que se enseña, sobre todo si se trata de conceptos complejos o abstractos. Se pueden utilizar comics o historietas si se trata por ejemplo de la historia de un prócer, exhibir películas, crear videos multisensoriales, video juegos interactivos con ejercicios prácticos de física, etc.
4.    Permitir la comprensión de los hechos a través de la vivencia.
Se refiere a un aprendizaje basado en la vivencia directa, en otras palabras, llevar el aprendizaje mas allá de la lectura de un libro o una clase oral del profesor, por ejemplo, darle un valor agregado a las clases, como el caso de realizar experimentos en el caso de química o física, manipular huesos en biología, y así sucesivamente.
5.    Tener en cuenta que los circuitos neuronales se construyen a través de la afectividad primaria. . Según Willis (sf.) el aspecto emocional conlleva al placer de aprender, lo que facilita el aprendizaje.  Este aspecto se tiene en cuenta la atención, la cual va asociada a lo emocional, de tal manera que, el estado de ánimo, las emociones y el humor conllevan al logro de ésta.

6.    Sea responsable de los procesos creativos y del arte en general.
Éste se refiere a la posibilidad de crear experiencias de aprendizaje con la modalidad de funcionamiento del hemisferio cerebral derecho, a través de la simulación o dramatización de hechos históricos, el dibujo, la educación plástica, la música, cuentos o fábulas que ilustren contenidos abstractos,   etc.

  
BIBLIOGRAFÍA 
Alcaraz y Gumá. (2001). Texto de neurociencias cognitivas. Editorial El Manual Moderno. México.
Navarro, (2008). Cómo diagnosticar y mejorar los estilos de aprendizaje. Primera edición, editorial Asociación Procompal. España.

Neurociencia aplicada a la educación. Estimulando ambos hemisferios. http://www.econo.unlp.edu.ar/uploads/docs/e_news_febrero_2009a.pdf  tomado el 4 de septiembre del 2012.
Salas, Raúl. (2008). Estilos de aprendizaje a la luz de la neurociencia. Primera edición, editorial Cooperativa Magisterio. Bogotá, Colombia.
Soriano, Guillazo y otros. (2007).  Fundamentos de Neurociencia. Primera edición, editorial UOC, Barcelona.

Willis, (Sf.). Neurociencia y educación: El placer de aprender relacionando experiencias. http://www.eliceo.com/destacados/neurociencia-y-educacion-el-placer-de-aprender-relacionando-experiencias.html  tomado el 4 de septiembre del 2012.

 

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